Mensaje para tu vida...

VERSÍCULO DE REFLEXIÓN

"No temas, porque yo estoy contigo;
no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo;
siempre te ayudaré,
siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia."

Isaías 41:10

viernes, 28 de diciembre de 2012

Un nuevo año...


            La vida que Dios nos ha permitido vivir es así, no todo será victoria, es necesario que haya derrotas para aprender de ellas, pero no es bueno que sigas sin superar esas situaciones que lejos de bendecir tu vida, te están causando un daño espiritual.

             ¿Tu ritmo espiritual ha bajado a causa de esta situación?, ¿el sabor de aquello que un día te sabia exquisito, ahora ha ido desapareciendo poco a poco?, es el sentimiento de frustración debido a esa situación que aun te esta causando daño.

          Quizás este año no has podido gozar como hubieses querido, porque a lo mejor ha habido mucho llanto, lagrimas y sollozos, y la verdad no esta mal llorar, ni derramar lagrimas, pero lo que no esta bien, es que sigas sin superar algo de lo cual Dios te quiere restaurar.

             Mientras Dios por todos los medios ha tratado de restaurar tu vida, tú sigues arraigado a ese sentimiento de frustración, mientras Dios ha querido hacer cosas lindas contigo, tú mismo sentimiento de derrota no te ha permitido ver más allá de lo que tus ojos carnales observan.

         ¡Ya Basta!, ¿Cuánto mas lloraras? ¿Cuánto mas te lamentaras?, ¿Cuántos mas seguirás pensando que no lo podrás superar?, ¿Por qué te das por vencido, cuando ni siquiera lo has intentado?, no te auto limites, no te menosprecies, tus capacidades son tan sorprendentes delante de Dios, que si por un momento lo quisieras ver, te darías cuenta que estas hecho para cosas mayores de las que tu crees.

        Es hora de enterrar eso que te abate, eso que te quita el sueño, eso que te roba autoridad de Dios, eso que elimina la sonrisa de tu rostro, llamale como tú quieras: pecado oculto, fracaso sentimental, culpabilidad, falta de perdón, atadura sexual, soledad, llamale como tú quieras, pero esa situación tiene que ser enterrada HOY MISMO.

        Y es que estamos a punto de concluir un año y comenzar uno nuevo, ¿Quieres que sea igual a este o peor?, entonces si realmente quieres que la pagina de tu historia en este nuevo año que comenzara sea distinta, entonces es hora de enterrar ese mal o malos episodios de los cuales fuiste protagonista en este año.

          Si le pediste perdón a Dios, El ya te perdono, si estas clamando por superar alguna situación, ten por seguro que Dios esta trabajando en eso en tu vida, sin que tu te des cuenta, si es algo que tu piensas que no puedes dejar, déjame decirte que en Dios TODO lo puedes y que El esta dispuesto a restaurar tu vida y devolverte la autoridad que el enemigo te ha robado.

             Este año termina y junto con el enterraremos TODO aquello que no fue de bendición, ni mucho menos de edificación para nuestra vida, todos esos malos episodios que hubiésemos querido evitar, tienen que ser enterrados de una vez por todas, olvidados como que sin nunca existieron, porque Dios que es un Dios de nuevas oportunidades, tiene un año nuevo para ti, con nuevos retos, nuevas propuestas, nuevas misiones y sin duda nuevas bendiciones.

           No vale la pena estar recordando mas todo aquello que te daño e hizo que bajaras tu nivel espiritual, es mejor observar todo lo bueno que Dios tiene para ti y los planes hermosos que están trazados para este 2013 especialmente para tu vida.

       Amados, es momento de tomar la determinación de sacar de nuestra vida definitivamente TODO aquello que nos había estado causando daño durante este año, y decirle al Señor:

“Padre, acá esta mi corazón, mi mente y todo mi ser dispuesto a ser renovado en tu presencia, porque este nuevo año que viene se que volveré a sonreír bajo tus alas”. 

“Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús”. Filipenses 3:13-14


Gentileza: www.sitiodeesperanza.com

viernes, 21 de diciembre de 2012

Reflexión de Navidad


             Pensar en estos días en donde todo mundo celebra la Navidad me llevo a pensar en algo en especial.

           Primero decir que la Biblia no describe el día especifico del nacimiento de Jesús, lo mas probable es que no nació un 25 de Diciembre como todo mundo lo celebra. La Biblia desde hace muchos antes había profetizado el nacimiento del Mesías y que sería en Belén (“Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad.” Miqueas 5:2 (Reina-Valera 1960)), pero no especifico nunca un año, un mes o un día en particular.

            Cuando la época que llamamos Navidad se acerca hay de toda clase de pensamientos, desde aquellos que celebran estás fechas, aquellos que no le dan tanta importancia y aquellos que se preocupan por pelear con medio mundo para dejar claro que Jesús no nació en estas fechas.

                 Yo me pregunto: ¿Importa realmente que día o mes nació Jesús?, pienso que ¡No!, lo importante que es que NACIÓ y que por medio de Él nosotros ahora podemos alcanzar perdón para nuestros pecados.

                Creo que para Dios mismo no fue importante indicar el día o el mes del nacimiento de Jesús, porque si así hubiese sido, Él hubiese especificado el día, mes y hora, pero no lo hizo porque sabe que como humanos somos capaces de darle más importancia a esos detalles que al mismo hecho de valorar su nacimiento como principio de la salvación del mundo.
            La Biblia dice que Jesús al nacer fue puesto en un pesebre: “Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón.” Lucas 2:7. La Biblia ni siquiera menciona el lugar exacto de su nacimiento, es decir la dirección exacta del lugar especifico que nació en Belén. ¿Por qué no lo menciona?, porque me imagino que Dios considera que si lo supiéramos haríamos de ese lugar un sitio de comercio y turismo, dándole más importancia al lugar que al hecho de que Jesús nació para darnos vida y vida en abundancia.

            Quizá alguien se pregunte: ¿Es bueno o malo celebrar la Navidad?. Pero lo que debemos celebrar cada día es el hecho de que Jesús vino al mundo, nació, creció, desarrollo su Ministerio y murió por nosotros y todo esto comenzó a través de su nacimiento. Si Él no hubiese nacido, ahora estaríamos perdidos, pero gracias a que nació, creció y murió por nosotros, ahora disfrutamos de una vida que solo Él ofrece.

               No perdamos el tiempo en discutir, contradecir o en tratar de aclarar si es o no bueno celebrar esto o aquello. Que tu corazón este centrado en una sola cosa en especial y es el hecho de que gracias a JESÚS HOY TENEMOS VIDA.
 
              ¿Importa cuando nació?, ¿Importa el lugar especifico?, ¿Importa la fecha exacta?, pienso que no, pues lo que importa realmente es que VINO AL MUNDO para que el mundo fuera salvo por Él.

              Lo importante de Jesús fue lo que hizo por nosotros y eso fue morir en la cruz por nuestros pecados, en sustitución de nosotros.

           Tú puedes celebrar lo que quieras, pero si Jesús aun no ha nacido en tu corazón, entonces en balde fue su venida a este mundo. A Dios más allá de que celebres una fecha en especifica lo que quiere es que puedas abrir tu corazón para que Jesús entre y nazca en tu vida y con ello puedas recibir la vida eterna que Él tiene preparada para los que creen en Él y confiesan su Nombre.

              Hoy quiero invitarte a que el propósito por el que Jesús vino a este mundo se cumpla en tu vida, ¿Cómo?, entregándole tu corazón a Él. Si nunca conscientemente le has entregado tu corazón a Jesús, hoy quiero invitarte a que repitas la siguiente oración junto conmigo:

“Señor Jesús, reconozco que soy pecador, reconozco que tu viniste a este mundo y moriste en mi lugar, hoy te pido perdón por todos mis pecados, me arrepiento con todo mi corazón de todo lo que hice, dije o pensé, reconozco que tu eres Dios y por lo tanto este día te acepto como mi Señor y Salvador personal, toma mi vida y transfórmala, ya no quiero ser el mismo, crece en mi para que yo pueda menguar, pero sobre todo ayúdame a hacer tu perfecta voluntad. Amén”

            Si hoy conscientemente y con corazón sincero realizaste esta oración, debes estar seguro que Jesús te ha perdonado de cualquier pecado que hubieses cometido, hoy el propósito por el que Jesús vino a este mundo se ha cumplido en tu vida, pues Él vino para darte vida y vida en abundancia.

¡Jesús nació, creció y murió por ti y por mi! 



Autor: Enrique Monterroza
Escrito originalmente para www.destellodesugloria.org

miércoles, 19 de diciembre de 2012

VÍSPERA DE NAVIDAD... EN NUESTROS CORAZONES




              La Navidad es una fecha muy importante en que la familia se reúne para convivir y por lo menos saborear algunos alimentos, sobre todo en Noche Buena. 

      Todo esto es bueno, sin embargo si pensamos en el hecho que conmemoramos pensaríamos también que cuando cada uno de nosotros vino al mundo  nuestro Papá, Mamá, tíos, primos y hermanos nos estaban esperando felices y contentos, por que alguien más se incorporaba a la familia, todos estaban, ansiosos y expectantes pero también preocupados de llevarnos un regalo para darnos la bienvenida al mundo. En cambio el Hijo de Dios, quien mas tarde se convirtió en el Salvador del mundo, tenía sólo a sus Padres esperándolo y estaba naciendo en un humilde pesebre. Más Dios llevó Pastores y sabios con regalos valiosos pues Él es quien se merecía lo mejor por sacrificarse al venir a este mundo a nacer por darnos vida a nosotros.

         Tal vez naciste en un lugar muy lujoso, o tal vez no, el hecho es de que ya estas aquí y que hoy en esta Navidad al recordar el nacimiento de Jesús, Él nazca también en tu corazón, porque puedes recordar mil veces la navidad o el nacimiento de Jesús pero si no nace en tu corazón es como si no hubiese Navidad. 

         La Navidad es eso, compartir, recordarse del necesitado y dar amor. Y sobre todo reflexionar y cambiar nuestras malas conductas con todos los seres que nos rodean y darle honor y adoración al que se la merece en esta Navidad… ¡¡¡A Jesús nuestro Salvador!!!

Deseo que en esta Navidad nazca en tu corazón el niño Jesús. Porque cuando lo haga verás que todo es felicidad.

FELIZ NAVIDAD…QUE DIOS LES BENDIGA